Qué es la criptoanarquía y los cypherpunks
Antes de Internet todos teníamos claro que las cartas eran privadas, ¿pero qué pasa con el correo electrónico? Estamos menos protegidos contra los abusos a la privacidad que antes de la era digital. De este tipo de riesgos a la libertad personal se intentan defender los criptoanarquistas.
Internet lo crearon visionarios y genios de la informática, pero hoy está dominado por grandes corporaciones e influencias gubernamentales.
En este nuevo contexto se han ido desarrollando modos de mantener o recuperar la libertad individual que la Internet libre soñada a finales del siglo XX siempre quiso impulsar y propiciar.
El criptoanarquismo sería una de esas ideologías ‘hacktivistas’, que en este caso se centra en la protección de la privacidad, la libertad política y económica mediante la criptografía.
Como todo movimiento tiene algunos perfiles moderados y otros más radicales, todo depende del enfoque y de los métodos utilizados.
En su ‘Manifiesto criptoanarquista‘ de 1988, Timothy C. May introdujo los principios básicos de esta filosofía.
Por supuesto todo ello contaba ya desde los años 80 con la hostilidad previsible proveniente de los Estados.

Criptoanarquía y Cypherpunks
¿Cómo funcionan los criptoanarquistas?
Los criptoanarquistas y los cypherpunks utilizan software criptográfico como herramienta para defender sus ideas.
Solemos asociar el prefijo ‘cripto’ a las criptomonedas, pero en realidad es de origen griego (de kryptós) y significa “oculto” o “secreto“.
La idea es la defensa de intercambios encriptados que garantizan el anonimato total, la libertad total de expresión y la libertad total para comerciar.
Una de las preocupaciones que tienen es la evasión de la censura, en particular la censura de Internet, por motivos de libertad de expresión.
Los programas utilizados por los criptoanarquistas a menudo permiten publicar y leer información de Internet u otras redes informáticas de forma anónima.
Por ejemplo, Tor, I2P, Freenet y muchas redes similares permiten páginas web anónimas ‘ocultas’ a las que solo pueden acceder los usuarios de estos programas.
Por otro lado, proyectos como Bitmessage permiten un sistema de mensajería anónimo destinado a sustituir el email.
Esto puede ser un arma peligrosa para criminales en la darknet, pero también es la salvaguarda de la libertad de expresión y comunicación de la disidencia en países dictatoriales.
Otro objetivo de los criptoanarquistas es construir y participar en la contraeconomía, que incluye el desarrollo de alternativas viables a los sistemas bancarios y el desarrollo de sistemas financieros alternativos que brinden al usuario opciones para una mayor privacidad o anonimato.
Las criptomonedas como Bitcoin y servicios como Silk Road y Black Market Reloaded hacen posible el comercio de bienes y servicios con poca interferencia de la ley.
Habría que distinguir en este sentido entre herramientas centralizadas y descentralizadas. Silk Road y Black Market Reloaded son ejemplos de mercados o herramientas centralizados y, por lo tanto, vulnerables. Del mismo modo, las carteras web empleadas por los usuarios de Bitcoin también están centralizadas y son vulnerables.
Los mercados descentralizados y distribuidos y los cambios de divisas presentan un riesgo significativamente menor para el usuario. Un ejemplo de un mercado descentralizado y distribuido es OpenBazaar, y un caso de cambio de moneda descentralizado y distribuido es BitSquare.
El desafío técnico en el desarrollo y mantenimiento de estos sistemas criptográficos es tremendo. Por ello, hay muchos programadores con ganas de progresar y llevar al límite sus desafíos intelectuales que se suman a estos proyectos más allá de sus ideales.
Los criptoanarquistas argumentan que sin las capacidades de cifrado, los mensajes, la información personal y la vida privada se verían seriamente dañados.
Es más, mientras algunos tildan sus acciones de peligrosas y antisistema, otros argumentan que la prohibición de la criptografía equivaldría a la erradicación del secreto de la correspondencia. Solo un estado policial draconiano criminalizaría la criptografía, a sus ojos.
¿Es actualmente legal la criptografía? En algunos países sí y en otros no, además de que en ciertos países las leyes de exportación son restrictivas.
Los ciudadanos del Reino Unido, por ejemplo, deben proporcionar claves para el descifrado de sistemas personales a las autoridades. No hacer esto puede resultar en penas de prisión de hasta dos años.
Dos famosos criptoanarquistas
Uno de los criptoanarquistas más famosos es Jeff Berwick, conocido por The Dollar Vigilante. Es una compañía de medios anarcocapitalistas enfocada en las criptomonedas, el oro, la plata, las acciones mineras y la banca offshore.
Berwick se define a sí mismo como luchador por la libertad contra los dos mayores enemigos de la humanidad: el Estado y los Bancos Centrales.
Berwick ha recibido muchas críticas porque es negacionista respecto a la pandemia, pero ya antes de que esto sucediera habló de una futura crisis global sin precedentes, y lleva años defendiendo que el sistema financiero moderno está al final de su Historia.
Otro conocido criptoanarquista es Max Keiser, un locutor y cineasta estadounidense. Presenta Keizer Report, un programa financiero transmitido por RT que da a conocer teorías económicas alternativas.
Junto a su mujer Stacy Herbert, es coanfitrión del programa semanal de economía Double Down en Radio Sputnik, presenta un programa semanal sobre finanzas y mercados en Resonance FM de Londres y escribe para The Huffington Post.
Conclusión
Siempre que un gran poder, como el tecnológico, se le da al ser humano, una gran responsabilidad recae sobre él. Internet sin duda es una gran herramienta global que puede permitirnos grandes logros y también puede ser el principio de nuestra destrucción.
En manos de unos pocos gobiernos y corporaciones multinacionales, un arma tan poderosa podría poner a la Humanidad en peligro de perder todos los avances en materia de libertades y derechos fundamentales que el siglo XX le brindó.
Los criptoanarquistas luchan por el equilibrio de fuerzas, por evitar que unos pocos dominen al resto. Mientras el GAFAT y el BATX cobran cada vez más fuerza, la población en su gran mayoría solo se preocupa por enviar Whatsapps y subir selfies a Instagram.
El mundo cambia a velocidades vertiginosas, y si algo nos enseñan los criptoanarquistas es a cuestionarnos el statu quo y a protegernos de posibles abusos contra la libertad y la privacidad.
Hay muchas formas y métodos, la criptoanarquía es solo uno de ellos, y además en sí misma está desorganizada y se lleva a cabo de muy distintas formas.
La cuestión es como mínimo cuestionarse el sistema y mantenerse alerta sobre posibles ataques a los derechos humanos.
Fuentes y Enlaces de Interés
Jeff Berwick (The Dollar Vigilante)
https://twitter.com/dollarvigilante
Max Keiser
https://actualidad.rt.com/programas/keiser_report
Alfre Mancera
https://twitter.com/alfremancera
https://www.youtube.com/c/AlfreMancera13